Adentrarse en el mundo del esquí y la nieve es una experiencia emocionante, pero a la vez puede ser un poco abrumador si desconoces este mundo. Tras trabajar dos años en las pistas de Andorra, en Guiadxs nos estamos especializando profundamente en el esquí para ayudarte a disfrutar al máximo de esta aventura blanca, por eso hemos preparado esta lista de consejos esenciales para esquiar por primera vez: desde la organización del viaje y elección del equipo hasta la seguridad en las pistas y las técnicas básicas.
Esta guía la hemos diseñado para que tu primera vez esquiando sea una experiencia divertida, segura y memorable. El snow es una de nuestras pasiones y nuestro objetivo es que te enamores de estos viajes tanto como nosotrxs. Ponte las botas, ajusta los esquís y prepárate para deslizarte por paisajes blancos y asombrosos ¡las montañas nevadas son una imagen que vas a conservar en la retina siempre!
Reservar un viaje de esquí
1. Presupuesto: siempre se ha dicho que el mundo del esquí no es para todos los bolsillos, y nada más lejos de la realidad. El precio del forfait, del alojamiento, el alquiler o compra de material, ropa y accesorios (siempre necesarios), bares y restaurantes, supermercados cerca de los resorts de esquí... nuestro primer consejo es que prepares la cartera: los precios son mucho más altos de lo que estamos acostumbrados.
2. Acude a una agencia de viajes: si es tu primera vez en la nieve puede que te sientas perdidx y estés escuchando muchos términos por primera vez: forfait, aprè-ski, ventiscas, etc. Las agencias de viaje especializadas, además de ofrecer paquetes con descuentos muy atractivos de hotel + forfait, ofrecen ayuda y asesoramiento en la organización y ejecución de estos viajes. No dudes en contar con sus servicios y ayuda también al comercio local 😉.
3. Elige tu destino: ¿eres debutante, esquiador estándar o nivel experto? según tu nivel de esquí hay pistas adaptadas a tu nivel. Hay resorts con cientos de kms y otros que cuentan con 20-40-50 km... depende si te deslizas por primeva vez... no necesitas recorrer los 200 kms de Grandvalira. Sierra Nevada por ejemplo, tiene muy buena zona para debutantes, además de ser exclusiva en el sur de la península, en cambio los Alpes exigen un nivel alto-experto de esquí por su altitud y su cantidad de pistas rojas y negras.
4. Reserva con mucha antelación: la antelación con la que reserves es clave para conseguir las mejores gangas. Sin embargo, no se puede anticipar y garantizar un estado de pista óptimo. Hay que tener en cuenta que si las ofertas no son reembolsables y las pistas no están en buenas condiciones o son pocos los kms abiertos, no se podrá hacer reembolso. Es cuestión de jugársela y hacer la danza de la nieve. Los meses con nieve más asegurada suelen ser Enero-Febrero o Marzo; hay que seguir los pronósticos de nieve.
5. Qué es el forfait: es el pase o ticket que da acceso a los remontes y servicios de las pistas: telecabinas, telesillas, telesquí, cuerdas o alfombras. Sin forfait no esquías. Puede ser de uno o más días, incluso de una temporada, y puede incluir seguro opcional (100% recomendable). Los pases de temporada, según el resort, pueden costar hasta 1300 € (como en Sierra Nevada o Grandvalira). Sea cual sea tu forfait, cuídalo como oro en paño.
6. Hotel + forfait: puedes reservar el alojamiento por una parte y comprar los forfaits a las pistas o en taquilla (con su correspondiente cola). Cuando compras un forfait para varios días, el precio del pase por día se va reduciendo. Cuando compras un paquete de alojamiento con forfait para 'x' días, todavía se reduce más y encima te lo gestiona el hotel (una preocupación menos). Cuando veas una oferta de este tipo, solo tienes que comparar y verás que sales ganando.
7. Ubicación del alojamiento: no reserves a lo loco; déjate aconsejar en una agencia de viajes. Un error grave muy común a la hora de reservar tu primer viaje de esquí es no tener en cuenta dónde te vas a alojar. Debes considerar tener una buena conexión con las pistas: ya sea a pie, transfer gratuito de tu hotel, transporte público o parking gratuito. ¿Nuestro consejo? que tenga fácil acceso a pie o transfer gratuito (ya sea de las propias pistas o del hotel). De no ser así, te vas a arrepentir, TE LO ASEGURO.
8. Ropa y accesorios para esquiar: da igual si es tu primera vez o eres expertx. La equipación de esquí es imprescindible si no quieres arruinarte la experiencia. Ten encuenta que te vas a mover entre temperaturas de -15ºC y 5ºC en el mejor de los casos. Desde la ropa térmica, aislante e impermeable (regla de las 3 capas), a lo que debes añadir cada accesorio que es imprescindible: guantes, balaclava, gafas (a partir de ahora las llamaremos máscaras o venticas)… si se te olvida cualquiera de estas cosas, se te puede arruinar la mañana. Acabarás comprando de urgencia en cualquier tienda a pie de pista, y te va a costar un riñón. Tenlo en cuenta.
En las pistas
6. Calentar: prepara el cuerpo; calienta tus músculos y articulaciones para evitar lesiones, especialmente si eres una persona que no practica deporte de normal. El esquí es un deporte muy intenso y explosivo que pone nuestros cuerpos al límite. Tanto si haces deporte con asiduidad como si llevas una vida más parada, calentar es lo principal.
7. Los remontes: como dice la palabra, los remontes son los medios de las pistas de esquí que te ayudan a remontar las pendientes o laderas de montaña. Son los sistemas mecánicos que te suben a lo más alto de las pistas y es aquí donde necesitarás tu forfait para hacer uso de ellos. Existen varios tipos de remontadores:
- Telecabina: son cabinas cubiertas que protegen del frío y el viento. Caben bastantes personas y puedes ir sentado o de pie. También se le dice 'huevo'. Suelen salvar las pendientes más grandes y masificadas.
- Telesilla: son los asientos que cuelgan de un cable y literalmente te hacen sentir que vuelas, así que mantén la barra de seguridad siempre cerrada y abrígate bien porque el viento corta la cara ahí arriba. Es muy común caerse al bajar del telesilla y ten en cuenta que no se detienen: si caes y te quedas en el mismo sitio, seguirá cayendo más gente sobre ti, así que si te caes ¡apártate!
- Telesquí: también conocidos como 'perchas'. Son cables con un palo o un pequeño asiento que se coloca entre las piernas y te arrastra sobre la nieve, pendiente arriba. Para mi personalmente, estos son los sistemas más complicados (aunque tampoco son muy comunes).
- Cuerdas: normalmente estos sistemas se encuentran en zonas llanas donde no hay nada o muy poca pendiente (normalmente). Consiste en una cuerda en movimiento, donde tú te agarras y te dejas arrastrar. Si te caes, la norma es bien sencilla, aparta para no hacer que la gente que viene detrás siga cayendo sobre ti.
- Alfombras: se encuentran en las zonas infantiles y son unas cintas donde te colocas sobre ellas y te desplazan. Sin más.
Los diferentes tipos de remontes |
8. No consumir alcohol: esquiar es como circular por una carretera. No entiendo por qué no se prohíbe consumir alcohol en las pistas (supongo que porque son privadas y el alcohol es un gran negocio allí). En el esquí y snow se pueden alcanzar fácilmente velocidades de 70-100 km/hora. ¿A que a nadie se le ocurriría beber cerveza y tomar chupitos y después practicar cualquier otro deporte a esa velocidad? pues aquí se puede. Por eso la probabilidad de accidentes es alta.
Este deporte requiere de un nivel de equilibrio y reflejos alto, que el alcohol nubla completamente. Así que hazlo por ti y por el resto de esquiadores y si vas a beber, HAZLO MUY MODERADAMENTE. El resto de esquiadores no tiene la culpa de tus chisperas. Tras el cierre de pistas hay fiestones muy guays de aprè-ski.
9. Balizas y señales: siempre debemos llevar un mapa en papel o digital para poder ubicarnos, ya que es muy fácil acabar desorientados. Las balizas nos permiten ubicarnos en la montaña y en el mapa (también en caso de accidente). Nos indican el nombre y el nivel de dificultad de la pista, según el color. Los palos que delimitan las pistas también son del color del nivel de la pista (verde, azul, rojo o negro).
10. Nivel de las pistas / nivel de esquí: existen cuatro niveles de pistas adecuadas para el nivel cada esquiador. Aquí podríamos volver a los consejos del principio y si eres debutante, buscar un resort de esquí donde puedas disfrutar del esquí a tu nivel. Hazte también con un mapa de pistas (en papel o digital) para no perderte y trazar las rutas adaptadas a tu nivel:
Pistas verdes: principiantes. Son pendientes muy suaves y lugares amplios sin obstáculos, perfectos para la toma de contacto con el esquí o el snow. Cada día verás que vas dominando el equilibrio y la técnica poco a poco. Van a ser unos días muy divertidos de caídas y aprendizaje con la familia, amigxs o la pareja.
Pistas azules: nivel intermedio. Pendientes un poco más empinadas, pistas algo más estrechas. Son ideales para principiantes que ya dominan algunas técnicas y controlan los giros. También son las más divertidas para esquiadores avanzados. Junto con las rojas son mis favoritas.
Pistas rojas: nivel avanzado. Pendientes desafiantes solo para esquiadores con gran dominio del esquí/snow y habilidad para deslizarte en diversas condiciones (obstáculos como hielo, baches o charcos de agua). Existe una manía entre algunos principiantes, de querer estrenarse el primer o segundo día en una pista roja para contar la hazaña. Eso es una auténtica incoherencia y lo único que haces (a parte del ridículo) es ponerte en peligro a ti y obstaculizar y entorpecer a los de tu alrededor, porque como indica la pista: es avanzada, no para los que se estrenan. Así que, por mucha confianza que tengas en ti mismx, si es tu primera vez, no bajes por aquí. Aunque creas que será muy guay poder contarlo, no lo vas a pasar bien.
Pistas negras: nivel experto. Las pistas son muy empinadas y algunas imponen hasta a los más expertos (especialmente si tienen hielo u otras condiciones adversas). No se caracterizan por ser divertidas, sino porque descenderla con buena habilidad supone un gran desafío. No se las recomiendo a nadie en su primera o segunda (ni tercera) toma de contacto con el esquí. Al final, disfrutar del esquí y fluir consiste en dominar la técnica y la velocidad dentro de tu nivel, y eso no se consigue en tres escapadas a lo largo de tres años.
Primeras nociones básicas
11. Caídas: las caídas están a la orden día en el esquís y especialmente en snow así que fuera la frustración. Forma parte del proceso de aprendizaje y cada caída te enseña algo nuevo y te ayuda a mejorar. Ten en cuenta que pueden durar varios días, incluso semanas (es completamente normal). Hasta los más expertos se caen y el que no se cae es porque se ha quedado estancado.
Cuando te caes con los esquís, según la velocidad, es normal que se suelten los esquís y esto sucede para evitar lesiones en las piernas. Si te caes sin que suelten los esquís (o con la tabla de snow), tendrás que levantarte en perpendicular a la pendiente, o te acabarás deslizando hacia abajo. Si vas con esquís, toma impulso y ayúdate a levantarte con ellos.
12. Aprender a frenar: debemos tener claro que lo más importante en los deportes de nieve (siempre, seamos novatos o expertos) no es ir rápido, sino saber frenar. Tanto en esquís como snow, lo primero que debemos aprender a controlar es la velocidad y la frenada: frenar controla nuestra velocidad y nos hace controlar nuestros movimientos. Esto es lo único que nos puede hacer evitar accidentes, por tanto, es muy importante que aprendamos, poco a poco, a controlar nuestra velocidad y ser capaces de detenernos (y no chocarnos/salirnos de la pista).
13. La cuña: es la técnica más básica y principal para debutantes de esquí: con esta técnica controlarás el freno y el giro en ambas direcciones. Consiste en formar una 'V' invertida con los esquís, juntando las puntas delanteras (sin solaparse) y manteniendo los talones separados. Es importante tener el cuerpo relajado y desplazar el peso del cuerpo a una pierna u otra, según a dónde queramos girar. Si es tu primera vez: comienza practicando esta técnica!
14. Ceder el paso / sentido común: ya nos controlamos en la pista o sino, nos tiramos al suelo antes de colisionar con alguien. En cualquier caso, a la hora de incorporarnos de nuevo en la pista, tenemos que mirar si viene alguien por detrás (como si nos incorporásemos a una carretera). Intentaremos prever los movimientos de los esquiadores que llevamos delante y dejaremos espacio (nunca sabremos si realmente controla los esquís) iempre dejaremos espacio entre esquiadores para prevenir coli
15. Hielo en las pistas: el hielo en las pistas puede ser bastante problemático por varias razones: aparece en forma de placas con un color más oscuro (o a veces camuflado en la nieve) y puede provocar pérdida de control, caídas y lesiones. Requiere más técnica y equilibrio y desgasta el material (siendo necesario afilar los cantos y poner cera en ocasiones). Siempre que detectes y anticipes una placa de hielo, esquívala.
15 + 1. Las tablas de snow: si eres snowborder, siempre que te quites la tabla, SIEMPRE tienes que dejarla del revés (con las fijaciones sobre la nieve para quedarse clavada). En caso contrario, a poca pendiente que tenga la pista, la tabla se deslizará hacia abajo y la perderás. Esto es muy peligroso ya que puede golpear o cortar a alguien que haya más abajo. Si esto sucede grita para avisar a la gente.
Haciendo caso a todos estos consejos, te puedo (casi) garantizar una buena experiencia en tu debut en la nieve y seguro que querrás repetir. Cuéntame cómo te ha ido en tu estreno ¡estoy deseando saberlo! 😊.
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